Cementerio de Montparnasse

Cuando te vas unos días a una ciudad tan enorme como París, normalmente todos acabamos en los mismos sitios, así que no iba a ser yo la primera que os descubriera el Louvre o Notre Dame.

Hoy he preferido hablaros de un cementerio muy especial. Ya sé que estáis pensando que igual ir a visitar un cementerio no es lo que vosotros haríais si estuvierais en la Ciudad de la Luz. Pero se dio el caso que nos quedaba un rato antes de partir hacia el aeropuerto, que estábamos dando una vuelta por la zona de Montparnasse, y que bueno, los cementerios en París están, digamos, más presentes en el bullir de la ciudad.

Algunas personas van paseando por allí como si de un parque se tratase, y otros se lo toman como si fueran a ver un museo.

Los cementerios de París

La ciudad de París es enorme, tiene más de 12 millones de habitantes. Y por supuesto, tiene muchos cementerios. Concretamente podemos encontrar 14 cementerios dentro del área metropolitana, y otros 6 cementerios en el extrarradio.

Sin embargo, de estos veinte, los más famosos son estos tres:

Père-Lachaise (cimetière de l’est)

Booking.com

Probablemente uno de los más visitados, y no me quedo corta si digo que es uno de los cementerios más famosos del mundo. Es el más grande dentro de los muros de la ciudad, y alberga más de 70.000 tumbas.

Está situado en el distrito XX, llamado Belleville, y se sitúa un poquito lejos de lo que es la Cité (el casco histórico, dónde la ciudad de Paris empezó a surgir).

Se llega fácilmente si seguimos la línea 3 de metro hasta la parada Pére-Lachaise o hasta la Gambetta.

De estilo neoclásico, fue diseñado por el arquitecto Alexandre Théodore Brongniart, y abrió sus puertas en el mes de mayo de 1804.

Entre las tumbas más famosas que atraen a miles de turistas a cruzar las puertas de este cementerio, se encuentran las siguientes:

Jim Morrison (The Doors), Chopin, Oscar Wilde, Molière, Maria Callas, Jean de La FOntaine… entre otros muchos.

Tiene hasta su propia página web, donde podremos ver las tumbas en una galería virtual

Montmartre (cimetière du nord)

Aunque no es el siguiente más extenso, sí lo podríamos clasificar como el segundo más visitado por los turistas que viajan a la ciudad de París. Se encuentra en el distrito XVIII, barrio de Montmartre. Muy cerca de la plaza Clichy (siguiendo el Boulevard Clichy, dónde está el Moulin Rouge).

Actualmente posee una extensión de 11 hectáreas, aunque en su inauguración, en 1825, poseía poco más de una.

Una de las cosas más curiosas que posee el Cimetiére du Montmartre, es precisamente su ubicación, pues se encuentra construido en un antiguo socavón encima de una vieja mina, por lo que está por debajo del nivel de las calles que hay alrededor.

El cementerio de Montmartre, para mí, es un reflejo del barrio en el que se sitúa. Muy artístico, bohemio, con toques románticos. No en vano allí se encuentran enterrados muchos artistas, sobre todo los que trabajaban o vivían en dicha zona.

Una de las tumbas más emblemáticas que posee es la de la actriz y cantante Dalida (1933-1987), sin embargo, podéis ver una lista de tumbas de gente famosa en el siguiente link.

Montparnasse (cimetière du sud).

Es el cementerio del que os quiero hablar más extensamente en esta opinión, y el segundo y más reciente que he recorrido en la ciudad de París. Se encuentra situado en el distrito de Montparnasse, el número 14. Muy cerca de la torre de Montparnasse, en la zona sur de la urbe.

Cómo es el Cementerio de Montparnasse

En esta ocasión, el último día del viaje pudimos recorrer el cementerio de Montparnasse, también llamado cementerio del Sur. Actualmente ocupa 19 hectáreas, por lo que sigue al Pére-Lachaisse en cuanto a extensión en cementerios dentro de la ciudad.

Está situado en el distrito número XIV, denominado con el mismo nombre, Montparnasse.

Se inauguró en el verano del año 1824. Si os fijáis, los tres cementerios de los que os he hablado un poco se inauguraron a principios de 1800. Esto es porque se hizo una reforma en la que se construyeron estos nuevos cementerios a las afueras de la ciudad para reemplazar a los antiguos que había en París, aunque se dice que esto no tuvo muy buena acogida, ya que los parisinos no querían ser enterrados a las afueras de la ciudad.

Se llega muy fácilmente hasta las puertas de Montparnasse. Recuerdo que nosotros habíamos estado esa mañana dando una vuelta por la Citè, subimos a ver las gárgolas de Notre Dame, y cominos en el Quarter Latin. Desde allí cogimos el metro en la línea 4, en la estación de Sant Michel, y la seguimos hasta la estación de Raspail, que queda al lado.

La entrada al cementerio es gratuita, y se puede visitar libremente desde las 9.00 hasta las 17.30 en invierno, y hasta las 18.00h en verano.

Nada más cruzar el umbral de la entrada a Montparnasse, nos encontraremos frente a un poste con un cartel indicativo. En el lado izquierdo del cartel encontramos un plano del cementerio, con las calles y los cuadrantes en los que está dividido, así como puntos localizados.

En el lado derecho del cartel encontramos una lista con la relación de tumbas famosas que podemos visitar, y el número que se corresponden en el plano.

Montparnasse cuenta en la actualidad con unas 35.000 sepulturas, entre las que se destacan personajes tales como Jean Paul SARTRE, Charles BAUDELAIRE, Simone de BEAUVOIR, Julio CORTAZAR, Cesar VALLEJO… y muchos más que no nombraré, pero que podéis consultar fácilmente.

El cementerio de Montparnasse es un oasis de paz en medio del bullicio de la ciudad. Es increíble ver como al cruzar sus puertas te invade la tranquilidad que se respira dentro. Y eso, que desde dentro del recinto, puedes alzar la vista y ver impasible la torre de Montparnasse, pues se encuentra cerca del lugar. Cierto es que la torre de Montparnasse se ve prácticamente desde cualquier punto de la ciudad, pero creo que verla desde el cementerio siempre es una experiencia cuanto menos, paradójica: ¡Cuantos huesos y restos tan antiguos descansan bajo tus pies, mientras que ella se levanta culminando el cielo del París vivo!

Pasear entre las tumbas, para mí, fue una experiencia agradable. Recorres el lugar a tu aire, rodeado de losas y nombres grabados. Algunas sepulturas tienen un trabajo de esculpido maravilloso. Otras, sin embargo, no son más que una piedra antigua, comida por el paso del tiempo, cubierta de musgo, y en la que apenas puedes ver el grabado que allí había.

Buscar las tumbas que te apetece ver, algunas veces es difícil a pesar de haber consultado la guía de las mismas que hay en la entrada. No creo que se puedan llegar a ver todas, pues en ocasiones, aunque aparece señalada la zona, hay que «rebuscar» un poco entre las lápidas. Nosotros estuvimos alrededor de una hora, y las tumbas de Cortazar, Baudeleire, Sartre, y Beauvoir (seguro que me olvido de alguna) fueron de visita obligada.

¿Merece la pena acercarse hasta Montparnasse?

Es muy posible, si pasáis unos cuantos días en París, que os acerquéis al barrio de Montparnasse para algo. Por ejemplo, para ver la panorámica de la ciudad desde la Torre de Montparnasse, o para comer en alguna de los muchos restaurantes de crepes que hay en la zona. En la misma Rue Montparnasse sin ir más lejos, hay muchos de estos locales.

Entonces, si os sobra tiempo, no creo que cueste nada acercarse al cimetière du Montparnasse a pasear entre una amalgama de recuerdos enterrados, algunos más conocidos, y otros un poco menos.

Imágenes: Peter Poradisch (Wikipedia) | Jérôme Blum (Wikipedia) | Chabe01 (Wikipedia) | LPLT (Wikipedia)