Aunque ya se acaba la temporada de esquí hoy os hablaré de esta estación que se encuentra muy cerca de Barcelona y a la que he hace unos años acudí varias veces.
Para empezar os diré que si sabéis esquiar y lo que queréis es esquiar esta no es vuestra estación.
Rasos de Peguera es una estación pequeña con pocas pistas (en total 10: 2 verdes, 2 azules y 6 rojas, pero no hagáis caso de los colores pues son facilísimas) y pocos remontes (6 telearrastres) y normalmente poca nieve que sirve para iniciar a los críos en la práctica del esquí.
Dispone de buenos monitores que están acostumbrados a enseñar a niños y se comportan con ellos de maravilla (el que enseño a mi hija cuando tenía 5 años hasta le limpiaba los mocos).
Además como es una estación muy pequeña acostumbra a haber muy poca gente (la gente que sabe esquiar no viene a estas pistas) y esto va bien para los muy principiantes.
Otra ventaja es que se encuentra muy cerca de Barcelona por lo que puedes ir y volver en un solo día sin pegarte el gran madrugón y además te ahorras el dinero de pagar el Túnel del Cadí.
Sin embargo tiene la desventaja de que según el invierno que haga corres el riesgo de que haya poca nieve.
Yo estuve yendo bastante, hace 4 años, cuando mi hija, que tenía entonces 5 años, empezó a esquiar, nosotros íbamos de excursión hasta allí y le cogíamos un monitor una hora (llamábamos durante la semana para reservar siempre el mismo monitor, pues a ella le encantaba). Nosotros no cogíamos forfait puesto que ya he dicho que si sabes esquiar se te hacen demasiado pequeñas y de aburres en seguida.
Además en proporción con otras pistas es caro ya que cuesta 22,80 € adultos y 16,80€ niños). Después de la clase de esquí, practicábamos con ella en un arrastre muy corto que hay para los que están aprendiendo.
Si alguien va y necesita equipo os aconsejo también visitar la tienda de alquiler de material donde también venden material de otras temporadas que para iniciar al niño no está nada mal. Yo compré las primeras botas de esquí de mi hija allí, hace ya 4 años y me costaron 1500 de las antiguas pesetas y duraron 3 temporadas.
Como era pequeña también dedicábamos un tiempo a jugar con el trineo (aunque en la estación en principio no están permitidos). Antes de llegar a las pistas hay un pequeño refugio al lado de la carretera donde hay unas ligeras pendientes que permiten deslizarse bien y mientras los críos juegas tu puedes tomar un café al sol.
Además cerca de las pistas hay un restaurante que se llama “Els Roures” que tienen una comida buenísima, es barato y el ambiente es excelentes, también disponen de un pequeño chiquiparc en a parte de arriba para que los niños se entretengan.
En conclusión para que los niños tomen un primer contacto con el esquí y planteando el día como una excursión a la nieve y una buena comida, yo la recomiendo.
Imagen: Jordi Malanyeu
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